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Dimensión ligeramente creciente, con un salto en el número de marcas y en los showrooms. - Malatesta anunció sus ideas: el cambio real se verá a partir de la próxima edición.
- En la participación internacional, destacó el avance de Francia.
Este año, el mes de febrero arrancó muy fuerte para la actividad de la moda en Madrid, al superponerse en fechas el salón y la pasarela, el primero estrenando director y la segunda estrenando nombre (y patrocinador principal), en recintos contiguos del parque ferial de Ifema, en los pabellones 12 y 14, área temática asignada a este sector.
El Salón Internacional de la Moda de Madrid, SIMM, se celebró en tres jornadas, del 2 al 4, en las plantas inferiores de los citados pabellones (más el Centro de Convenciones Norte para alojar los showrooms, de los que luego se hablará), ocupando 13.850 m2.
Se trataba de la edición número 67, primera organizada por el nuevo director nombrado en el otoño, Francesco Malatesta, cuya biografía ya hemos publicado en los boletines quincenales de Textil Exprés; el cual (procedente del mundo de la moda, pero nuevo en el ámbito ferial) ha relevado, por jubilación, a Pola Iglesias, tras trece años de permanencia de ésta al frente del certamen.
Como corresponde a todo nuevo ejecutivo, Malatesta (que es también director de las demás ferias de moda en Ifema: calzado y novias) se propone hacer una renovación del SIMM, pero de una manera juiciosa, es decir, no una revolución. El salón ya era esta vez diferente, y en las ediciones próximas lo será más, pero por el momento seguía siendo reconocible para sus habituales.
Acogió a 403 expositores, con alrededor de 800 marcas (con un aumento muy considerable, del 60% según el informe ferial, respecto a febrero de 2011), de 13 países. El incremento del número de marcas se debió principalmente a la mayor incorporación de las extranjeras, en especial las francesas (con más de 30 expositores de este país).
La propia organización destacaba la presencia, en el conjunto, de nombres como Intuition Paris, Lang Furs, Le Fate, Pause Café, Espri, Moma Costume, Cocoa, Escondite Francés, Gymtonic, Simorra, Beat the Beatle, Kookai, Ana Mora, J+G, Flamenco, Veneno en la Piel, Vilagallo, Oky Coky y Alba Conde
La información oficial del servicio de prensa de Ifema ha sido muy correcta en cuanto a la naturaleza de las cifras: ha puntualizado 403 expositores (empresas) y 800 marcas. Los órganos de información, en general, han incurrido en una deformación de la magnitud al confundir los términos: decían que concurrían 800 firmas (es decir, empresas), duplicando la cifra de supuestos partícipes; pero no es culpa del SIMM.
Clasificación de la oferta. Los contenidos se clasificaban en nueve sectores de producto, ya existentes en el esquema anterior, más el de la prensa especializada.
Los de producto, en el pabellón 12, eran:
—Charm: moda para una mujer romántica con estilo urbano y práctico (con alrededor de 60 firmas).
—Class: básicos contemporáneos (con unos 70 expositores).
—Ego: diseñadores emergentes (21 pequeños stands); calificados como los jóvenes más rompedores.
—Warm & Moda en Piel: una decena de stands de moda en lana y tejidos técnicos para la lluvia y el frío, y una treintena de confeccionistas en piel (Iberpiel Moda).
Y en el pabellón 14 desplegaban su oferta:
—Gala: cóctel, noche, etiqueta y ceremonia, con unas 25 firmas.
—Ready: colecciones de servicio inmediato (pronto moda, apartado siempre importante en el SIMM), con algo más de un centenar de expositores.
—Shop: elementos y servicios para el punto de venta, con una decena de firmas.
—Touch: bisutería, bolsos, cinturones, chales y otros accesorios para personalizar el «total look», con unas 25 marcas.
—Natural (materiales sencillos y tejidos naturales), y Country (folk e ibicenco): sin espacio particularmente señalizado en los planos, salvo un pabellón colectivo de las Islas Baleares.
Los showrooms, la otra parte del salón. Como ha venido ocurriendo en las últimas ediciones, una parte de la oferta tenía alojamiento separado en el Centro de Convenciones Norte, de Feria de Madrid, aunque bajo la gestión de los mismos responsables que el resto del SIMM.
Se trata del espacio denominado Showrooms de Moda Ifema que acoge a un grupo de expositores que presentan marcas del segmento medio-alto del mercado, tanto nacionales como extranjeras, y que desean mostrarlas a los clientes potenciales en un ambiente más reservado que el general del salón.
Entre las firmas participantes, la propia organización destacaba la presencia de Aiefield, Albert S. Lasry, Anathea, Andrea Lisinicchia, Anneclaire, Bleu Blanc Rouge, Byblos, Cantallops 1897, Caractère, Dellacianacashmere, Didier Parakian, Dismero, Elena Miró, Eleonora Amadei, Galloti, Gina Bacconi, HS Collection by Sofia de Habsburgo, Les Copains, Luisa Cerano, Manetti, Michael Wagner, Miroglio España, Nina Ricci Foulards, Gerard Darel, Mercedes Alonso y Piedad Rodríguez.
En conjunto aportaban a la oferta ferial un centenar de marcas, un 22% más que en febrero del año pasado, cuando este espacio se organizó por primera vez.
Castilla y León, Comunidad invitada. El SIMM inició en septiembre de 2010 la práctica de considerar a una Comunidad Autónoma española como Comunidad invitada de cada convocatoria. En aquella ocasión fue Galicia. En las dos ediciones de 2011 se distinguió sucesivamente a Aragón y Baleares. En febrero de 2012 fue el turno de Castilla y León.
La literatura informativa del salón anunciaba una nutrida representación de empresas de esta región en los sectores Charm, Ego, Warm y Touch, que hubiera sido lo natural. Sin embargo, en el catálogo del certamen sólo aparecía una decena de empresas expositoras domiciliadas en dicha Comunidad (y, por otra parte, no relevantes). En el programa de actos no había ninguno relacionado con el ámbito castellano-leonés.
Según datos facilitados a Ifema por la Junta de Castilla y León, la región alberga a más de 700 empresas del sector textil, que emplean a unas 4.000 personas. Todas estas compañías han destacado en los últimos años, dice la Junta, por su capacidad de innovación y adaptación a los nuevos tiempos. Concretamente, durante el pasado año 2010 se produjo un incremento de las ventas globales superior al 10%, y en el primer semestre del año 2011 la facturación alcanzó los 32 millones de euros.
Podríamos añadir que en los últimos meses han circulado noticias sobre empresas castellano-leonesas con dificultades, pero esto, obviamente, no lo reflejaba el informe. Ahora bien: explicaría perfectamente que la respuesta a la convocatoria del SIMM haya sido débil.
El programa de animaciones. Como ya es habitual, tuvieron lugar diversos encuentros profesionales, sobre tendencias de moda, nuevas experiencias de márketing y merchandising, métodos de gestión, etc., particularmente abordados con vistas a incrementar la competitividad del sector; así como exposiciones y desfiles. Fue su principal escenario el Foro Speaker’s Corner.
Especial interés tuvieron la mesa redonda organizada por la Asociación del Comercio Textil y Complementos, Acotex, sobre las mejores fórmulas para vender en las redes sociales, o la exposición de trabajos de los alumnos del Centro Superior de Diseño y Moda de Madrid en torno al Volumen Experimental.
El director Francesco Malatesta mantuvo dos reuniones informativas, una en inglés con la prensa internacional, y otra en español con la del país, para explicarles el Plan de Futuro del SIMM.
[Publicado en TEXTIL EXPRES Suplemento 199 — febrero 2012 ].