Web Analytics

Índice del artículo

 


Retail Forum 2018 abordó experiencias y desafíos para el comercio detallista, en un entorno de omnicanalidad.

TEXTILEXPRES-REVISTA-236Antonio García Rebollar, d.g. de Política Comercial y Competitividad en el Ministerio de Economía.

El comercio detallista, al que recientemente hemos dado todos en designar por una voz inglesa que parece hacerlo todo más científico, como es «retail» (aunque su traducción literal es, precisamente, venta al por menor, es decir, al detall), está en un momento de profunda transformación, y quizá por ese motivo proliferan los congresos, seminarios, y las jornadas de debate dedicadas al mismo. Entre todas ellas, una convocatoria ya con cierta trayectoria es la del Retail Forum organizado por iKN Spain, empresa de formación empresarial, eventos y soluciones de «networking» (otro anglicismo con fortuna) que convoca estos eventos en España, Italia y Méjico, además de otros muchos ajenos a nuestro sector, como los dedicados a la banca, la farmacia, los seguros, o, de manera transversal, el Día del Director de Datos.
El Retail Forum 2018 se celebró en su quinta edición el 21 de marzo en Madrid. Se presenta como un espacio de encuentro para analizar tendencias, proponer ideas y compartir posibles soluciones a los nuevos retos del futuro. Textil Exprés estuvo presente y tomó nota de algunas intervenciones producidas dentro de su denso programa, que también contó con una zona dedicada a «la tienda del futuro», donde pudieron verse algunas soluciones aplicadas en vivo, así como con otra zona de pequeños stands de proveedores tecnológicos y de servicios para el comercio.



En España tenemos al mayor detallista de moda del mundo, y al primer gran almacén de Europa.
El sector del comercio representa en España el 12% del PIB, genera más del 10% del empleo y llevaba tres años creciendo a tasas del 3%, y aunque en 2017 pinchó ligeramente con un índice de comercio minorista que creció sólo un 1,7%, los datos de inicio de año hasta febrero apuntan a ser optimistas también para 2018. Así lo expuso Antonio García Rebollar, director general de Política Comercial y Competitividad en el Ministerio de Economía, Industria y Competitividad, en la sesión de apertura del Retail Forum, un encuentro anual para el sector de la distribución que este año se celebró el 21 de marzo en salas del área de congresos del recinto ferial de Ifema.
Es un sector importante para el país —dijo García Rebollar—, bastante atomizado, con un millón de empresas dedicadas a esta actividad, aunque también con grandes empresas nacionales de fuerte peso internacional, como son el grupo Inditex, «el número uno en el retail de moda en el mundo, y que ha demostrado ser competitivo incluso en los nuevos tiempos», y El Corte Inglés, el mayor gran almacén de Europa. En conjunto, España cuenta con tres de los mayores retailers entre los primeros 25 de Europa.
La Dirección General de Política Comercial pone anualmente a disposición del sector, desde hace cinco años, un presupuesto dentro del Plan Integral de Comercio Minorista (también sufragado por otros ministerios con medidas de apoyo, como la agenda digital a través de Red.es), cuya dotación en 2018 es de dos millones de euros, a los que se suman cuatro más aportados por las Cámaras de Comercio (vía fondos Feder), para ayudar a la transformación digital de las empresas. Quizá no es una cantidad muy destacable, pero el comercio dispone de otras muchas fuentes complementarias de ayuda, como son programas de comunidades autónomas y ayuntamientos.
Dentro del citado Plan Integral, en el último quinquenio se ha llegado a 140.000 comercios con acciones gratuitas de diagnóstico y consultoría, talleres, conferencias, ayudas a campañas de dinamización comercial, y subvención a acciones apoyadas en nuevas tecnologías, como márketing en redes sociales o analítica de clientes. Además se impulsa una docena de proyectos singulares cada año, básicamente en colaboración con municipios para potenciar zonas comerciales.
La DG de Política Comercial coopera también con Turespaña y Segittur entendiendo que el comercio detallista debe parte de su crecimiento al auge del turismo: el año pasado el gasto turístico en el país ascendió a 80.000 millones de euros.
Por último, está el desafío de la internacionalización, que no se limita a la salida física de las empresas de comercio al extranjero, con la apertura de tiendas, sino que cada vez tiene más que ver con la tecnología. El año pasado las ventas por comercio electrónico crecieron un 25% y llegaron a los 25.000 millones de euros, y buena parte de ese comercio «se la están llevando grandes actores de internet, sobre todo de EEUU y China».
«Una vez que hemos llegado a ser superavitarios en el terreno comercial, y uno de los principales exportadores de Europa superando a Francia y Alemania en ratios como exportación en términos de PIB, en comercio electrónico deberíamos llegar a esos mismos niveles».
El director general de Política Comercial mencionó el programa «eMarket Services» del Instituto de Comercio Exterior, Icex. Entre otras cosas identifica las plataformas de comercio online más relevantes de cada país, que no son sólo las más conocidas por todos. Como ejemplo, en China no sólo se dispone las dos o tres de mayor tamaño, sino que hay medio centenar más, B2B o B2C, en las que el producto a exportar puede encajar mejor, o la inversión necesaria es más adecuada y con mejor rendimiento según el producto.
[Esto último, si bien es de interés para las industrias exportadoras, no resulta tan atractivo para comercio detallista español, a menos que se considere bajo la vía del denominado «marketplace» para minoristas – observación de Textil Exprés].
Aparte de esta intervención de carácter político, la jornada contó con un denso programa de sesiones paralelas, de diversos actores de la distribución detallista (no necesariamente relacionados con nuestro sector, pero de todos ellos puede aprenderse y sacar lecciones para cada comercio particular).


Cron Job Starts