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En el Día Mundial del Agua, una firma española recuerda que hay tecnología que aporta soluciones.
Hoy, 22 de marzo, se celebra el Día Mundial del Agua. Con ese motivo, Enrique Silla, primer ejecutivo de la empresa española Jeanologia, ha manifestado que, después de la crisis de la pandemia de Covid-19, «la siguiente crisis mundial será la del agua: hemos tenido grandes crisis a lo largo de la historia como la del 29 o la del petróleo, pero, sin duda, si no tomamos las medidas oportunas, la siguiente será la del agua».
Ha indicado que «la industria textil es responsable del 20% de la contaminación del planeta y, dentro del textil, los jeans son una de las prendas más vendidas y con mayor impacto ambiental durante toda su producción, por lo que es necesario cambiar de forma inmediata los procesos productivos uniendo esfuerzos de todas las partes implicadas».
Jeanologia se ha especializado en soluciones de sostenibilidad para la industria textil. Ha lanzado lo que denomina MIssionZero, cuyo objetivo es «deshidratar y desintoxicar la industria del acabado del denim en 2025».
Una de sus propuestas tecnológicas es H2Zero, «el primer sistema circular de tratamiento de agua, que permite que la misma cantidad de agua que se usa en los procesos se reutilice, creando así un círculo perfecto». H2 Zero afirma que es capaz de reciclar el 100% del agua utilizada y garantizar Zero residuos, con lo que se reduce el consumo de agua, el uso de energía, y se eliminan vertidos, ahorrando más 10 m3 de agua por hora. En todo el mundo hay 19 plantas de producción con este sistema.
Cada año, con motivo del Día Mundial del Agua, Jeanologia da a conocer los resultados de su «cuenta de ahorro ecológica», con la que mide en metros cúbicos el agua contaminada que se deja de verter a los ríos y mares del planeta gracias a su tecnología. En 2020 las soluciones de la compañía ahorraron cerca de 15,5 millones de metros cúbicos de agua, es decir, 15.500 millones de litros, la cantidad necesaria para el consumo humano anual de 844.815 personas.
Esto es, al menos, lo que la industria ha logrado ahorrar el pasado año. Sin contar, por supuesto, otras soluciones que haya podido aplicar, con diversas tecnologías.
